“Si un usuario tiene una factura y considera que hay costos abusivos en ella, nosotros en Susalud asumimos la auditoria de esa factura, tráiganos la factura, reúnase con nosotros y conversaremos con la clínica privada para conocer por qué razón se hizo determinado cobro”.

Así lo señaló el superintendente  de la Superintendencia Nacional de Salud (Susalud), Carlos Acosta, al dar mayores alcances de la resolución publicada este jueves que obliga a las clínicas privadas a informar sobre los precios de servicios y medicamentos destinados al tratamiento de pacientes aquejados con el coronavirus.

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“La misma resolución sostiene que cualquier variación de precios que se haga tiene que ser reportado a Susalud y si esto no se cumpliera amerita una sanción y si los precios se hubieran trasladado al cobro de los pacientes amerita la devolución de los montos cobrados al usuario”, indicó en diálogo con TVPerú.

“Las reglas de juego deben estar claras y sobre ellas se darán las sanciones y los procesos administrativos. No queremos quejas posteriores, queremos las cosas sobre la marcha, tener los precios a la disposición de todos facilita que el usuario haga control ciudadano”, aseveró.

De lo contrario, aseguró que “nosotros tenemos auditores médicos que auditarán las facturas que hayan cobrado a los usuarios”. 

Recordó que el problema surgió mientras el Estado hacia todos los esfuerzos para atender la situación de los pacientes aquejados con la enfermedad. Es ahí cuando algunos del sector privado deciden multiplicar ganancias y utilidades en lugar de sumar esfuerzos. Esta es una situación inmoralmente inaceptable e indignante y motiva la reacción de todos, aseveró.

En la víspera, Acosta informó a los miembros de la Comisión de Fiscalización del Congreso de la República que existen 102 clínicas que están siendo investigadas por presuntos cobros indebidos en lo que respecta a la toma de pruebas moleculares. 

Para realizar las denuncias, el máximo representante de Susalud a puesto a disposición todos los contactos que existen en las redes sociales y si los usuarios llaman a la línea 113, la queja será derivada a su sector para tomar cartas en el asunto, finalizó.