¿Sabías que una sola pila usada puede contaminar hasta 600 mil litros de agua y que el mercurio de un fluorescente puede dañar el sistema nervioso de las personas? Ahora que ya lo sabes, recuerda que la incorrecta manipulación de los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) puede producir daños graves a la salud y también contaminar el ambiente. 

Según el Ministerio del Ambiente (Minam), en el Perú, cada persona genera un promedio de seis kilos y medio de RAEE cada año. Solo en el 2019 se generaron 204 000 toneladas de este tipo de residuos, valorizándose alrededor de 2 800, es decir, menos del 2%. Para aumentar esta última cifra y evitar que los artefactos -que alguna vez nos fueron útiles- dañen nuestros ecosistemas, es fundamental que la ciudadanía contribuya activamente a la valorización de estos residuos.

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A continuación, te damos estos consejos:

- Debes saber que los RAEE son aquellos aparatos eléctricos y/o electrónicos que dejan de funcionar y ya no tienen arreglo.

- Lo primero que debes hacer si tienes a la vista algún RAEE en tu hogar, es separarlo y almacenarlo, evitando que le caigan rayos solares o lluvia: Si estás en tu centro laboral, envíalos al Área de Logística para su acopio temporal seguro.

- Luego, averigua si hay alguna campaña de acopio o recolección de RAEE en tu distrito. Actualmente algunas municipalidades incentivan este tipo valorización. Si no hubiere alguna de estas iniciativas en tu distrito, consulta en la tienda donde compraste tu artefacto, para saber si tienen un punto de acopio para destinar estos residuos. 

- Evita tener contacto con este tipo de residuos, pues algunos de los componentes de los citados artefactos son considerados peligrosos y pueden poner en riesgo tu salud y la de tu familia.

- En tu centro de trabajo, para retirar adecuadamente los RAEE de tu oficina, el Área de Logística debe contactar con un sistema de manejo autorizado para entregarlo a un punto de acopio. Las entidades públicas han sido capacitadas para dar de baja y donar sus RAEE, entregándolos a los sistemas de valorización autorizados.