El adjunto para prevención de conflictos de la Defensoría del Pueblo, Rolando Luque, destacó la iniciativa oportuna de la presidenta de la república, Dina Boluarte, de dirigirse al país en el contexto crítico que atraviesa la zona sur del país.

“Lo primero que yo destaco es la decisión de la presidenta de dirigirse al país. Los líderes deben hablarle al pueblo sobre todo en las circunstancias más críticas. Y hacer un examen de lo que está pasando”, señaló.

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Señalar cuál va a ser el rumbo, cómo se van a enmendar los errores que hubo, ser autocrítico ante la ciudadanía, creo que esa es una manera de reconectar con la población en la medida que haya esa reposición, acotó.

Detalló que es impostergable una relación de respeto entre el gobierno y la ciudadanía. Porque puede tener un impacto en las movilizaciones, en la decisión de las personas de salir a protestar o de encausarse por la vía del diálogo.

Remarcó que Dina Boluarte pidió públicamente perdón, pero lo que corresponde enseguida al perdón es realizar las enmiendas correspondientes. “Y si ha habido algunos errores, algunas violaciones de las normas, en el caso del uso de la fuerza, por ejemplo, esto tiene que ser corregido de inmediato”, agregó.

“Una muerte es algo no sólo doloroso para las familias, es doloroso para todo el país. Que además complica la situación para la gestión de este conflicto”, comentó.

De otro lado, informó que este viernes hubo 83 puntos de bloqueo. Hay pocas circunstancias de enfrentamiento entre la policía, la población.

“Si ha habido una preocupante acción violenta en la mina Antapacay; se atentó contra una bomba de agua. Hubo movilizaciones, bloqueos, paros en 44 provincias lo que representa el 22 %. Son cifras que han ido en aumento en los últimos días, pero no de manera considerable”, puntualizó el representante de la Defensoría del Pueblo.