José Tello cree que el presidente del Congreso abrirá un diálogo con el Ejecutivo y una cercanía con las FF. AA.
El constitucionalista y docente universitario, José Tello, dijo que el nuevo presidente del Congreso, José Williams Zapata, ayudará a establecer un diálogo permanente con el Ejecutivo, “pero también un acercamiento hacia las Fuerzas Armadas y policiales y consolidar algo muy importante y que se desdibuja con este tipo de gestos, es, digamos, el ejercicio del cargo de jefe supremo de las Fuerzas Armadas”.
“Yo vería la elección del actual presidente del Congreso como una oportunidad, es parlamentario de una fuerza política de derecha como Avanza País, obviamente, enfrentado con el gobierno, pero, además, también, una persona que demuestra un cierto nivel de poder de opinión y eso daría pie para abrir un diálogo que sería muy saludable porque podría, por un lado, tratar de llevar mejor la relación del Legislativo”, señaló.
Durante su análisis de los 30 años de la captura del genocida terrorista Abimael Guzmán, y a la par, rememorar las acciones militares contra el terrorismo, remarcó que “Chavín de Huántar es una pieza medular, es más, quien ha salido electo como presidente del Congreso fue jefe del operativo”.
De otro lado, opinó que hay que tener claro que las Fuerzas Armadas y las policiales no son deliberantes y en el Estado de derecho son funcionarios públicos que se diferencian de otros porque usan uniforme y tienen funciones especializadas.
“Por ejemplo: el orden nacional, el cuidado de nuestras fronteras, la defensa nacional, pero en lo que se refiere a las policiales tiene que ver con el orden interno. Entonces, hay que tener bastante ponderación y tener bien claro que el poder civil elegido en las urnas es quien gobierna y en el caso de las Fuerzas Armadas y policiales mantienen un sometimiento al jefe supremo de estas fuerzas”, sentenció.
Añadió que tiene que haber un ánimo de sacar las cosas adelante porque “también por el lado del presidente tiene que existir un nivel de acercamiento”. Agregó que están distanciados y eso tampoco ayuda. “Si bien es el jefe supremo, también tiene que haber más acercamiento porque se ha generado, y eso no es saludable, una especie de posición de cierre de filas”, dijo.
