El analista político, Henry Rafael, dijo que le parece un poco difícil que la Comisión de Alto Nivel de la OEA “pueda tener una visión amplia del tejido social”.

“Entonces, escuchar a varias voces siempre puede ser interesante. Pero tal vez termine abriendo el espacio y eso no le permite delimitar el campo de estudio o investigación”, señaló.

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Tiene que definir acciones específicas. Siento que no pasó porque al abrir demasiado deja otras voces que también pueden decir “¿por qué yo no?”, por ejemplo, acotó.

Reflexionó sobre la reunión con el grupo de mujeres que luchan por la Constitución. “¿A quiénes representa este grupo?”, se preguntó. Es claro que lo hace a un grupo creado para fines específicos, pero junto a ellas puede haber 20 o más organizaciones con nombres de otra índole, con otro tipo de orientación y que no fueron invitados porque no tuvieron la conexión de llegar.

El problema es que pierde la posibilidad de que si por alguna razón las decisiones que adopte, las sugerencias que adopte, no terminen siendo las más acotadas al problema político que vive el Perú van a salir voces a decirlo, manifestó.

Asimismo, explicó que la OEA tenía que reunirse con el órgano jurídico, político, legislativo, y con actores de los medios de comunicación. “Cuando se habla del tejido social el Perú es amplio y diverso. Yo pude trabajar en la Sociedad Interamericana de Prensa”, dijo.