Alerta máxima. Los habitantes de una ciudad al oeste de Japón han recibido la orden de no acercarse ni tocar a un gato de apariencia sospechosa o extraña, que cayó en una tina de productos químicos peligros. El felino logró salir, pero se escabulló en la noche.

Un empleado de una planta de revestimiento de metales en Fukuyama llegó a trabajar el lunes por la mañana y encontró huellas de patas felinas que salían del contenedor y se alejaban del lugar, informó la empresa.

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Las imágenes granuladas de la cámara de seguridad publicadas por la empresa muestran al fugitivo peludo huyendo de la fábrica, aparentemente ileso.

La tina, de tres metros (10 pies) de profundidad, contenía cromo hexavalente, que es cancerígeno y puede provocar inflamación de la piel.

"Avisamos inmediatamente a la policía, a la ciudad de Fukuyama y a los vecinos cercanos a nuestra fábrica", dijo a la AFP un representante de la empresa, que no quiso ser identificado.

"El incidente nos hizo comprender la necesidad de tomar medidas para evitar que animales pequeños como los gatos se cuelan, algo que nunca antes habíamos previsto", afirmó.

Las autoridades de la ciudad dijeron a los lugareños que evitaran tocar al animal e informaran a la policía inmediatamente si lo encontraban.

Hasta el momento no se ha informado de avistamientos del gato. Se ha solicitado a los residentes que si ven al felino, no lo toquen y llamen a la policía.