Las lágrimas de alegría por haber recibido los laureles deportivos cambiaron pronto al llanto de tristeza y frustración. La condecorada tablista nacional Analí Gómez sorprendió a los periodistas al mencionar que no podía seguir compitiendo.

"Ahora lamentablemente me he quedado sin auspicio y este año me he quedado estancada y nada, esperemos que el otro año haya más apoyo al deporte de la tabla más que nada. Seguir adelante y poder, si es que Dios quiere, traer la copa y representar al Perú", afirmó.

La surfista ganadora del título mundial de tabla femenino del 2014 denunció que debido al racismo los auspiciadoras no la apoyan como deberían. Sin ese respaldo Analí no puede participar en la competencia del tour de tabla.

"Así es la vida, para que veas, un poco racista. Ahora el surf, prácticamente las marcas, están apoyando a las rubias las que son para la portada, lamentablemente yo soy negra que chu... pero feliz  y orgullosa de haber logrado lo que hice", agregó.

Tras esta revelación, Gómez indicó que ahora se dedica a enseñar el deporte de la tabla a los niños y a pasar el tiempo perdido con su familia.