Un 06 de agosto del año 1824 se tuvo que librar la penúltima batalla para liberarnos completamente del yugo español.

Los ejércitos patriota y español, liderados por Simón Bolívar y por José Canterac, respectivamente, se enfrentaron en el lago de Junín (Batalla de Junín), combate que ganó la tropa peruana y que fue un aliciente para dar el último golpe en Ayacucho y decretar nuestra emancipación.

“Soldados, vais a completar la obra más grande que el cielo ha podido encargar a los hombres… El Perú y la América entera aguardan de vosotros la paz, hija de la victoria. ¡Vosotros sois invencibles!”, así arengó Bolívar, a su batallón para la lucha.

En el lago de Junín, en el momento que ya parecía una segunda derrota Patriota, se hicieron presentes en el campo de batalla -al mando de Isidoro Suárez y Andrés Rázuri- los “Húsares del Perú”, que se unieron y fortalecieron a los hombres de Bolívar, lográndose con ello la victoria.

En colegios, instituciones públicas y en las diferentes sedes del Ejército del Perú se conmemoró el 191 aniversario de esta gesta histórica. El historiador Roberto Mendoza, miembro de la Comisión Permanente de Historia del Ejército del Perú, destacó la importancia de este triunfo que dijo que se debe netamente a la Caballería del Perú.