El Congreso peruano aprobó este jueves, por unanimidad, el proyecto de Ley de control y vigilancia del espacio aéreo, que faculta a la Fuerza Aérea del Perú (FAP) para derribar las aeronaves bajo "sospecha razonable" de tráfico ilícito de drogas, entre otras 14 situaciones.

La iniciativa contó con el respaldo unánime de los 89 congresistas asistentes al pleno, después de un amplio debate del proyecto sustitutorio, presentado por el presidente de la Comisión de Defensa, Emiliano Apaza (NGP).

La norma detalla que previa a la interceptación de las avionetas, el dirigible sospechoso debe asumir la condición de "hostil" en el espacio aéreo peruano.

Así, solo en última instancia, la FAP recurrirá al empleo de la fuerza contra una aeronave hostil,  luego de haberse agotado  medidas de persuasión y cuando, en base a la evidencia, se puede concluir, razonablemente, que el propósito de la invasión al espacio aéreo peruano es causar muerte, lesiones graves a las personas, daños graves a los bienes o al medio ambiente.

De igual forma, se considera hostil a las aeronaves que no respeten los corredores establecidos por las autoridades o sobrevuelen a una altura no menor de 3,000 pies en un radio de 40 millas náuticas, entre otras 15 situaciones.

El procedimiento para la interceptación de avionetas "incluye identificación, intervención, persuasión y neutralización en forma progresiva y siempre que la medida anterior  no tenga éxito".

Entre las medidas de persuasión se considera obligar al piloto a aterrizar; y el disparo de ráfagas de advertencia, con municiones trazadoras. De no obtenerse respuesta, y como último recurso, se autoriza el disparo de proyectiles con la finalidad de ocasionar daños e impedir la continuación del vuelo.

Los legisladores sostienen que la norma "llenaría un vació", al dotar a las Fuerzas Armadas de un instrumento necesario para  la lucha contra el narcotráfico.