Congresistas por la región Cusco piden despedir a los trabajadores del despacho de Alejandro Soto, presidente del Congreso, por supuestos ataques en las redes sociales.

Ruth Luque, de Cambio Democrático-Juntos por el Perú; Luis Aragón, de Acción Popular; y Guido Bellido, de Perú Bicentenario, se pronunciaron luego de la denuncia periodística de Cuarto Poder que reveló a asesores y personal vinculado a Soto coordinando ataques de troles contra dichos congresistas.

[Lee también: Roberto Sánchez: moción de censura contra Alejandro Soto ya tiene 18 firmas digitales]

Luque consideró que todo congresista tiene que ser responsable de las acciones de sus trabajadores de confianza, porque ellos son contratados a solicitud del mismo parlamentario. Agregó que dos de esos empleados laboraron en su momento en el grupo parlamentario Alianza Para el Progreso y ahora están en la presidencia del Congreso.

“No podemos permitir que en estos espacios, como el Congreso de la República, se utilicen recursos públicos para generar una organización de troles. (..) Vamos a ver que la Comisión de Ética actúe de oficio. El jueves ese será uno de los temas, que de oficio, tendrá que tocarse”, indicó Luque.

Según la denuncia periodística, los asesores Eduardo Quezada, Sandra Rodríguez y Phenélope Contreras habrían creado cuentas falsas en las redes sociales, conocidas como troles, para defender a Alejandro Soto de críticas y atacar a los congresistas que lo cuestionaban.

El congresista Luis Aragón fue claro en exigir el despido de estos trabajadores. También pidió que Soto deje la presidencia del Congreso.

“Creo que es hora que estos trabajadores dejen de laborar en el Congreso de la República. Coincido con mis colegas que no podemos permitir que en el Congreso, en la presidencia del Congreso o cualquier bancada existan asesores con esos antecedentes”, añadió.

Por su parte, Guido Bellido exigió que los mencionados trabajadores sean sancionados administrativamente y luego separados. Indicó que no permitirá que algunos colegas estigmaticen o agredan.

“Nuestra postura es clara, personas al ser de confianza deben ser retiradas de Congreso de República. (…) No se puede usar a trabajadores remunerados para estos hechos tan lamentables”, precisó.