Las autoridades del Municipio de Machupicchu encendieron las alertas tempranas ante posibles peligros por la crecida de los ríos de la zona, con la finalidad de realizar monitoreos permanentes en los caudales del Alcamayo, Aguas Calientes y el Vilcanota.

Todo un equipo de 21 personas tiene el encargo diario, durante las 24 horas, de ver el nivel del caudal de cada río, incluso la turbidez, el olor y el ruido de las aguas, informó el alcalde distrital, Darwin Baca.

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El sistema se puso operativo ante las constantes lluvias y es la oficina de Gestión de Riesgos de la comuna distrital la que está a cargo de esta labor que obedece a un plan de contigencia para estos casos, indicó el burgomaestre.

Los encargados de la tarea están equipados con un sistema de comnunicación a través de radios UHF, las mismas que tienes repetidoras con antenas Hustler que garantizan una comunicación oportuna ante cualquier problema que puedan generarse a consecuencias de las lluvias, expresó Baca.

Hay que recordar que hace algunos años, alrededor de 2 mil turistas quedaron atrapados en esa zona del Cusco, esto debido al aumento del caudal del río Urubamba o Vilcanota, y al interrumpirse por varios días el traslado terrestre tuvo que recurrirse al rescate por vía aérea.