Seis años han pasado desde el fenómeno El Niño de 2017, aquella vez el río Piura alcanzó un caudal de 3400 metros cúbicos por segundo, con desbordes e inundaciones que causaron graves afectaciones. Las intensas lluvias, además, colapsaron desagües y el agua llegó hasta el metro y medio de altura. 

Tras el anuncio del fenómeno El Niño global en junio pasado, el gobierno declaró en emergencia a varios distritos y regiones del país, entre ellas Piura. 

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En Piura, son varios los sectores y niveles de gobierno quienes trabajan en actividades de emergencia ante la llegada del fenómeno El Niño. El Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento (MVCS), la Autoridad Nacional del Agua (ANA), la Autoridad para la Reconstrucción con Cambios, el gobierno regional y las municipalidades son solo algunas. 

Según cifras de la Defensoría del Pueblo, en la región Piura se ejecutan 340 actividades de mitigación que tienen más de 608 millones de inversión. Solo la ANA está encargada de la descolmatación de 77 puntos críticos en cerca de 150 kilómetros del cauce de los ríos Piura, Chira y quebradas. 

El Ministerio de Vivienda tiene a su cargo el casco urbano con la descolmatación de drenajes pluviales, limpieza de quebradas y la instalación de piscinas rompe tormentas en cuencas ciegas, donde el agua siempre inunda casas. 

“Estamos haciendo trabajos de limpieza y descolmatación. Estamos retirando toda la maleza y la basura en donde, lamentablemente, la población siempre tira sus desechos”, dijo Javier Vásquez, del Centro de Atención al Ciudadano del MVCS Piura.

Por su parte, el Proyecto Especial Chira Piura del Gobierno Regional trabaja, además, en el encimado de diques y mantenimiento de canales. Un trabajo que requiere de la articulación detallada entre autoridades, sectores del gobierno y la población.