El rey Carlos III de Inglaterra y su nuera, la princesa Catalina de Gales, esposa de su hijo mayor, Guillermo, fueron dados de alta el lunes tras someterse a operaciones de próstata y abdominal, respectivamente, según fuentes oficiales. Ambos suspenderán sus apariciones públicas programadas en las próximas fechas.

Carlos III fue operado de una hipertrofia "benigna" de la próstata en The London Clinic el pasado viernes. Por su parte, Catalina de Gales había ingresado al mismo centro hace trece días para una cirugía "abdominal" misteriosa.

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"La princesa de Gales ha regresado a su casa en Windsor para continuar recuperándose de la cirugía. Está teniendo una buena evolución", informó un comunicado oficial.

Tres horas después, el rey Carlos III, de 75 años, también abandonó el hospital. Vestido con traje y abrigo negros, saludó a la multitud que lo esperaba, acompañado de su esposa Camila.

INGLATERRA: MISTERIOSA DOLENCIA DE LA PRINCESA KATE 

La misteriosa hospitalización de Catalina ha acaparado la atención de la opinión pública británica en estos días, generando interés debido a la escasez de detalles sobre su cirugía "abdominal".

La operación de la princesa, de 42 años y una de las figuras más populares de la realeza, la mantuvo ingresada durante trece días, suscitando preguntas sobre su estado de salud.

Tras la intervención, que, según un comunicado oficial, "fue un éxito", Catalina ha cancelado todos sus compromisos oficiales hasta el final de las fiestas de Pascua, el 31 de marzo.

"El hecho de que la princesa permanezca en el hospital durante gran parte de los próximos quince días indica una operación seria", destacó The Times al día siguiente del anuncio del ingreso de Catalina.

Después de hacerse pública su hospitalización el 17 de enero, un día después de su ingreso, los medios británicos descartaron la posibilidad de que padezca cáncer.

Sin embargo, "dado el tiempo que se espera que esté en el hospital y su lento regreso a los deberes reales, es poco probable que su cirugía haya sido menor", explicó The Times.

El hermetismo en torno a la operación de Catalina contrasta con la transparencia en relación con la dolencia de Carlos III, quien fue operado el viernes de una hipertrofia "benigna" de la próstata.

INGLATERRA: TRANSPARENCIA SOBRE DOLENCIA DEL REY

Las precisiones se divulgaron con el objetivo de alentar a los ciudadanos varones a someterse a pruebas, ya que la monarquía generalmente no proporciona muchos detalles clínicos.

La iniciativa de la casa real resultó exitosa, ya que las visitas a la página dedicada a esta dolencia en el sitio del NHS, el servicio público de salud británica, aumentaron significativamente.

En las 48 horas siguientes al anuncio del problema de próstata del rey, se contabilizaron 26 000 visitas a la página, en comparación con una media diaria de 1 400 en fechas anteriores.

Los problemas de salud de Carlos y Catalina han dejado a la monarquía sin tres figuras importantes en estos días, ya que Guillermo también ha decidido suspender su presencia en actos públicos para estar junto a su esposa.

(Con información y fotos de AFP)