La Guardia Civil de España desarticuló una organización criminal que se dedicaba a la introducción de grandes remesas de estupefacientes en Europa a través de los principales puertos marítimos españoles.

La investigación se inició hace más de un año, donde se impidió la salida de 300 kilos de cocaína del Puerto de Valencia y se detuvo a tres personas.

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A raíz de esa intervención, se inició una operación policial a escala internacional, con la colaboración de autoridades brasileñas, norteamericanas y belgas, además de Europol.

El trabajo ha conseguido identificar a los principales cabecillas de esta red delictiva, desde Dubái hasta Brasil, y la incautación, en diferentes intervenciones, de 3 900 kilos de cocaína tan solo en España.

La operación, denominada Turia-Turfe, ha incluido actuaciones simultáneas en España y Brasil. En España, la operación dejó a siete personas detenidas, cinco registros en la provincia de Barcelona y la intervención de 400 kilos de cocaína en una nave industrial. La droga se alojaba dentro de un contenedor marítimo llegado al puerto de la capital catalana procedente de Brasil.

Simultáneamente, la Policía Federal brasileña ha realizado 30 registros domiciliarios y ha detenido a 20 personas.

De manera global, se ha conseguido detener a 28 personas y la incautación de 8 toneladas de cocaína, según informó la Guardia Civil en un comunicado.