El presidente de Colombia, Iván Duque, dictó una serie de medidas para combatir a los exjefes de las FARC que este jueves anunciaron una nueva rebelión armada, a quienes el mandatario calificó como “una banda de narcoterroristas” y no como una nueva guerrilla.

En primer lugar dispuso la creación de un equipo especial para perseguir a los cerca de 20 rebeldes que aparecen en el video del anuncio de un nuevo alzamiento. También ofreció 3 000 millones de pesos de recompensa (equivalentes a unos 882.000 dólares) por cada uno de ellos.

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Asimismo, Iván Duque dijo haber hablado con el presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, para contar con su colaboración en la captura a los exguerrilleros, que según él se refugian en el país llanero.

En otro momento, remarcó que Nicolás Maduro se encuentra detrás de esta nueva amenaza e instó al pueblo colombiano a no caer en la “trampa de quienes hoy pretenden escudarse detrás de falsos ropajes ideológicos para sostener sus andamiajes delictivos”.

Cabe mencionar que la mayoría de los excombatientes de las FARC (se calcula que alrededor de 7 000) dejaron las armas tras el acuerdo de paz entre la exguerrilla y el Gobierno.

En tanto, según inteligencia militar, las disidencias de las FARC, que hasta ahora no tienen una unidad de mando, cuentan con 2 300 hombres y mujeres y se dedican principalmente al narcotráfico y la minería ilegal.

En atención a esa realidad Iván Duque agregó que su gestión mantendrá el “compromiso” de no procesar a los excombatientes de las FARC que honren lo pactado durante la administración de Juan Manuel Santos.