Emergencia en Canadá. Más de 16 000 personas se vieron obligadas a evacuar sus hogares luego de que uno de los cientos de incendios forestales que azotan al país alcanzaron la provincia de Nueva Escocia.

Imágenes subidas a redes sociales muestran cómo grandes columnas de humo salen de casas y edificios, mientras que varios vehículos fueron destruidos por el fuego. Hasta el momento, autoridades no reportan heridos.

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El incendio obligó a los residentes de los suburbios a salir en plena madrugada. Las autoridades han desplegado a una gran cantidad de bomberos y brigadistas para controlar el voraz incendio con ayuda de helicópteros y cisternas.

Debido a esta situación, el gobierno local decretó estado de emergencia, mientras que el primer ministro de Nueva Escocia lo describió como un escenario sin precedentes.

Los vientos continúan avivando las llamas, por lo que las autoridades consideran que se necesitaba una gran lluvia para sofocar los incendios, aunque no se pronosticó ninguna para esta semana.

El lunes, varios incendios forestales persistían en ocho de las trece provincias y territorios canadienses. Se calcula que más de 11 mil hectáreas de bosque y más de 200 edificaciones han sido arrasadas en la localidad de Halifax.

En los últimos años, el oeste de Canadá se ha visto afectado repetidamente por fenómenos meteorológicos extremos, cuya intensidad y frecuencia han aumentado debido al calentamiento global.