El Campeonato Mundial de Fútbol Sub-17 se disputará en Lima, Chiclayo, Piura y Tacna, del 10 de noviembre al 2 de diciembre del presente año, y las coordinaciones para la remodelación de los escenarios deportivos que albergará el certamen se realizan de manera fructífera. El Proyecto Legado, encargado de las obras de refacción de las sedes, se reunió con autoridades gubernamentales de las ciudades elegidas, que le hicieron saber de la importancia de la competencia en la reactivación económica de sus regiones.

Hubo una reunión con los líderes estatales de Piura para tratar los trabajos de refacción del estadio Miguel Grau. Allí se dieron detalles de los trabajos de remoción de tierra, mantenimiento de butacas, puertas, servicios higiénicos, energía eléctrica, entre otros.

El torneo deportivo también es visto como una oportunidad para el desarrollo de las localidades de esta región y “generar corredores turísticos” que conecten las zonas de interés de la ciudad, lo que favorecerá a la generar empleos.

En Chiclayo, se recogió información sobre la remodelación del estadio Elías Aguirre, lo cual ayudará al fortalecimiento de su reactivación económica, como lo hicieron saber las altas autoridades de la región.

La remodelación del estadio Elías Aguirre será atractiva y útil para el desarrollo de la liga profesional de fútbol, en favor de la Federación Peruana de Fútbol y del Instituto Peruano del Deporte (IPD), por lo que se potenciará la economía de la región.

Con la finalidad de asegurar que el Perú cuente con la infraestructura deportiva necesaria para albergar el Mundial de Fútbol Sub-17, el 22 de octubre del 2022 fue publicada la Norma 31579, que faculta al Proyecto Legado la gestión de las inversiones y otras actividades para la preparación y desarrollo de este torneo internacional.