Inglaterra puede hacer historia hoy al conseguir su primera Eurocopa (2 p. m.), pero tendrá enfrente a una Italia reconstruida, ganadora de nuevo, y que ya sabe lo que es saborear el cetro continental.

Los ingleses de Gareth Southgate han aprendido de los errores del Mundial de Rusia 2018 para escapar de las semifinales y llegar a una final que se presentan como una alfombra roja hacia el trofeo. Además, jugarán en casa, ante más de 60 000 espectadores y sin la posibilidad de que la afición rival pueda venir hacia Londres.

Asimismo, el DT inglés ya ha encontrado su once tipo, pese a la cantidad de variables con las que juega. Declan Rice y Kalvin Phillips son imprescindibles en el medio del campo, así como Luke Shaw, John Stones, Harry Maguire y Kily Walker en defensa. Mason Mount ya ha vuelto a la titularidad tras su aislamiento, mientras que Raheem Sterling, tres goles en el torneo, y Harry Kane, cuatro, son insustituibles.

Mientras que, Italia llega a Wembley a completar un trabajo empezado hace tres años con Roberto Mancini. El técnico italiano recogió a un equipo hundido, sin ideas ni confianza y lo convirtió en un grupo que este domingo peleará por la gloria europea.

"Solo un loco dijo hace tres años que podíamos llegar a este punto, y es Mancini. Siempre creyó en nosotros. Somos un grupo maravilloso, y llegar a este punto tras tanto sufrimiento es algo extraordinario", afirmaba el centrocampista Federico Bernardeschi tras ganar la semifinal en la tanda de penaltis contra España.

De esta manera, los italianos llegan hoy a Wembley, donde Mancini confirmará al 4-3-3 visto en las semifinales, con Gianluigi Donnarumma en la portería, detrás de Giovanni Di Lorenzo, Giorgio Chiellini, Leonardo Bonucci y Emerson Palmieri.

Además, del intocable el trío del centro del campo, compuesto por Nicoló Barella, Jorge Frell Jorginho y Marco Verratti, mientras que el tridente lo formarán Federico Chiesa, Lorenzo Insigne y Ciro Immobile. Con esto la “Azurri” busca conseguir su segunda Eurocopa.