La parte sencilla de vender es pensar que alguien necesita de tu producto o servicio y que este dispuesto a comprarlo.

La parte complicada es elaborar una estrategia. Para ello, hay que partir de la premisa de que el proceso de ventas puede ser tan sencillo o complejo como tú quieras. Esto va relacionado con el tipo de oferta que tienes. No es lo mismo vender botellas de agua, que ofrecer un servicio de consultoría a la medida. Por eso, hoy te damos algunos consejos para que puedas vender más.

Ser efectivo

• Esto significa que realmente a quien quieres venderle te compre. Para eso investiga a la persona que vas a contactar. Si te preparas, la gente lo notará y aumentarás tus probabilidades de éxito.

Habla de forma clara

• No trates de buscar palabras tan rebuscadas, enfócate en que el cliente pueda entenderte de la forma más sencilla.

Poner atención en los detalles

• Presta atención a tu cliente y aprende a escuchar, para luego hacer preguntas inteligentes que ayuden a determinar por qué un prospecto puede llegar a ser un futuro cliente.

Cumple con lo que prometes

• Si te atreviste a ofrecer algo con tal de llevarte la venta, más te vale que lo cumplas. De lo contrario, no lo hagas. Si mientes o exageras, al final esto te costará más que no cerrar el trato.

Trabajar tus preguntas inteligentes

• Para sacarle el mayor provecho a una entrevista con un prospecto, todo parte de un entrenamiento que debes realizar con tus colaboradores del área comercial.

Cobrar es parte de vender

• La cobranza se ve desde antes de que vendas. Por eso, asegúrate que el cliente pueda cumplir con las obligaciones de pago.

Se vale diversificar

• Siempre busca nuevos prospectos, recuerda que un comprador no puede representar más del 20% del total de tus ventas. De ser así, te enfrentarás a una gran presión para vender y es cuando vienen los errores.

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