Los pobladores de las comunidades de Jilatamarca y Aguas Calientes, ubicada en la zona cordillera del distrito de Ácora, en Puno, sufren enfermedades respiratorias y la pérdida de sus animales por las bajas temperaturas. 

En ambas localidades, los termómetros registran hasta 15 grados bajo cero. Los ciudadanos señalan que el agua amanece todos los días congelada y deben romper los bloques de hielo para dar de beber a los animales. 

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Por otro lado, el intenso friaje afecta a los niños y adultos mayores, quienes sufren tos, gripe y hasta neumonía. 

PUNO: BAJAS TEMPERATURAS AFECTAN A LA POBLACIÓN

“[Necesitamos] ropa de abrigo para todas las personas, desde mayores de edad hasta los niños. Necesitamos energía eléctrica y el mejoramiento de carreteras, que es lo más urgente”, sostuvo un poblador. 

ÁCORA: ESTABLECIMIENTOS DE SALUD ABANDONADOS

El equipo de TVPerú Noticias constató que el establecimiento de salud 1 de Jilatamarca, donde laboraban solo dos trabajadores, cerró porque los ambientes se encuentran inhabitables por el paso de los años. 

El municipio distrital espera que la Dirección Regional de Salud (Diresa) firme el convenio para su refacción. 

Según el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología del Perú (Senamhi), las bajas temperaturas en esta zona continuarán hasta el mes de julio y parte de agosto.