"No permitan el avance del socialismo", clamó el presidente argentino Javier Milei durante una convención ultraconservadora cerca de Washington, donde estimó que la justicia social "es una aberración".

El jefe de estado argentino intervino poco después del expresidente Donald Trump, con quien no celebró una reunión formal por un problema de agenda, pero habló brevemente entre bastidores.

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"Ha conseguido mucho, es un gran caballero, es MAGA", dijo Trump sobre él al inicio de su discurso. Bromeó diciendo que Argentina es de los pocos que pueden abrazar literalmente el eslogan en inglés (Make Argentina Great Again).

"No nos vamos a rendir en volver a hacer a Argentina grande nuevamente", afirmó Milei, que finalizó con un alegato: "No entreguen su libertad, luchen por su libertad porque si no luchan por la libertad los llevarán a la miseria".

"¡Viva la libertad carajo!", repitió varias veces, recibiendo aplausos del público.

El presidente libertario, que ganó las elecciones de noviembre pasado, desmenuzó su ideología para llegar a una conclusión: "Los socialistas arruinan nuestras vidas".

Javier Milei llegó al poder con un afán reformista. Dictó un megadecreto que modifica centenares de leyes para revertir una crisis que mantiene a más del 50 % de la población en la pobreza, con una inflación anual del 211 % en 2023. También devaluó el peso un 50 %, liberalizó los precios y reflotó un programa crediticio de 44 000 millones de dólares con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Pero algunas de sus reformas han provocado manifestaciones de protesta y fuertes críticas de la izquierda.

(Con información y fotos de AFP)