En el Perú, la violencia y la discriminación hacia la mujer le costaron al sector privado pérdidas por US$6,744 millones en el 2012. El Ministerio de la Mujer, en defensa de los derechos de las peruanas, y las empresas vienen impulsando la iniciativa “Sello Empresa Segura, Libre de Violencia y Discriminación hacia la Mujer”. Hoy, la ministra Omonte dio mayor información sobre los avances del proyecto.  

A saber, “Sello Empresa Segura…” es una especie de ISO con el que el MIMP reconoce las compañías locales que, conscientes de la referida problemática y del impacto que acarrea en sus costos, muestran esfuerzos (programas, iniciativas, políticas) para garantizar ambientes de trabajo que promueven la no violencia y no discriminación contra la mujer.

En el marco de las actividades de promoción del concurso de este 2015, cuyas inscripciones  cierran el próximo 30 de enero, la ministra Carmen Omonte estuvo presente hoy en los Laboratorios Bagó del Perú, una de las empresas que junto a otras 7 ganaron el sello en el 2013, para –a modo de ejemplo- conocer la serie de programas que esa entidad implementó para involucrar a sus trabajadores y trabajadoras en la prevención y disminución de la problemática.

Cabe destacar que hace unos días 6 gremios empresariales (Cámara de Comercio de Lima (CCL), Asociación de Exportadores (Adex), Cámara Peruana de la Construcción (Capeco),  Sociedad Peruana de Hidrocarburos (SPH), Sociedad Nacional de Industrias (SNI) y la Confederación Nacional de Comerciantes del Perú (Conaco)) se han sumado a la iniciativa y promoverán entre sus agremiados la participación en el Sello.

En el Perú, donde de acuerdo con el INEI alrededor de 1.5 millones de mujeres laboran en el sector privado formal, el 20.3% de trabajadoras ha admitido haber sufrido violencia de parte de su pareja en los últimos 12 meses. Asimismo, un 72% de mujeres violentadas declararon haber bajado su rendimiento productivo en sus centros de labores.

Según la UNSMP  y la agencia alemana de cooperación internacional GIZ, en el 2012, el sector privado peruano sufrió pérdidas, como consecuencia de la violencia contra la mujer en las empresas peruanas, por US$6,744 millones, lo que equivale al 3.7% del PBI.

Cabe contrastar que, recientemente, un estudio ha determinado que la violencia de género cuesta más de 109,000 millones de euros al año a los países de la Unión Europea (UE).

Pese a esta situación, lo preocupante fue que en ese mismo año solo el 1.7% de los casos de violencia doméstica fue detectado por las oficinas de recursos humanos de los centros de labores en Perú.