Las aftas bucales son lesiones benignas que no suelen causar mayores problemas más allá de la incomodidad. Puede surgir en cualquier punto de la cavidad oral: lengua, labios, encía y garganta.

Su aparición puede ser por desbalances en el sistema inmune o el ataque de virus y bacterias que tenemos en la boca, aunque también se dan por falta de higiene, consumo excesivo de tabaco, estrés, pocas horas de sueño y más.

Estas heridas en la boca son muy dolorosas y muchas veces dificultan actividades simples como hablar, comer y besar. Por eso, te damos algunos consejos para evitar su aparición:

Agua oxigenada

• Mezcla este producto con agua común y aplica directamente en la llaga con un algodón.

Leche de coco

• Puedes conseguir esta leche vegetal en las tiendas naturistas o tomarlo directamente de la fruta. Luego haz enjuagues bucales con el líquido entre tres y cuatro veces al día.

Aloe vera

• Se trata de un potente antiséptico que ofrece sus propiedades antiinflamatorias, regeneradoras e hidratantes. Corta un pedazo de sábila, ponla a remojar la noche anterior para que elimine el yodo, luego retira el gel interior y colócalo sobre la úlcera y deja que seque.

Yogur

• Utiliza el yogur griego. Entre las bacterias benéficas y el ácido de la leche que componen este lácteo se encargarán de controlar el pH bucal y al mismo tiempo de curar las aftas.

Bicarbonato de sodio

• Es muy eficaz, pero, al mismo tiempo, algo doloroso. Crea una pasta con agua y esto te ayudará a que cicatrice el afta y le digas adiós al dolor.

Hielo

• Cuando recién aparece la úlcera en la boca es probable que la zona esta inflamada, así que utiliza un cubo de hielo para bajar la hinchazón y eso te ayudará a eliminar el malestar